Director coral de extensa y destacadísima trayectoria, dirigió el Coro Universitario, además de los coros Voces de la Plaza, Polifónico Santa Elena y San Felipe Santiago.
En un apretado e inevitablemente incompleto resumen, destacamos que desplegó una intensa actividad docente, tanto a nivel de Enseñanza Secundaria como en la formación terciaria, ya sea en el Instituto de Profesores Artigas, donde formó varias generaciones de profesores de Educación Musical, como a través de la cátedra de Dirección de coro, en la ex Escuela Universitaria de Música, y en el Instituto de Música como Coordinador de NEUMA (Núcleo de Estudios Universitarios en Músicas Antiguas).
Maestro de innumerables directores y profesores, dejó una huella imborrable en quienes pudieron compartir con él la experiencia coral, que vivía con intensidad y rigor.
Se destacó como gestor cultural, llevando adelante eventos de formación y perfeccionamiento profesional, y abordando la labor musical con un fuerte compromiso estético. Su actividad incluyó prácticamente todas las áreas de la música coral, buscando en todo momento la excelencia y el aporte pedagógico y musical, tanto a nivel local como internacional, donde era reconocido como referente sólido.
Asumió un liderazgo contagioso en la promoción y el mejoramiento de la actividad coral en las más diversas formas, con tenacidad y entusiasmo. Muestra de ello es su participación protagónica en el esfuerzo para la creación de un ámbito que congregara a la comunidad coral, inicialmente en la fundación de la Asociación Uruguaya de Canto Coral, que derivara en la posterior creación de la actual Asociación Coral del Uruguay (ACORDELUR).
Hacemos llegar nuestras sentidas condolencias a sus familiares, allegados, seres queridos, y a toda la comunidad coral y musical, ante tan sensible pérdida.