Un punto de partida para “desarmar” eso que llamamos salud mental

El 15 de agosto de 2024 en el Salón 318 de la Facultad de Artes se desarrolló la jornada “Prevención y promoción en Salud Mental. Aproximación y sensibilización con la comunidad de Facultad de Artes”. La jornada, que surgió como iniciativa de Decanato y fue organizada por la Unidad Académica de Formación y Apoyo Docente (UFAD), pretendió abrir e instalar el tema de la salud mental en nuestra comunidad. La actividad se enmarca en las acciones vinculadas a una convivencia reflexiva y crítica como política de promoción de bienestar y convivencia saludable que lleva adelante la Universidad de la República (Udelar) que establece «la importancia del aporte por parte de la Udelar de acompañar el proceso de implementación de la Ley de Salud Mental y comprometer a esta casa de estudios a realizar su mayor esfuerzo en la esfera política y académica por parte de todos los servicios, para construir ámbitos de enseñanza, extensión e investigación de grado y posgrado” (Resolución Nº 36 adoptada por el CDC del 23/06/20).

Mesa de oradores en jornada de salud mental con público de espaldas asistiendo
Fernando Miranda, Rodrigo Arim y Enrico Irrazábal en la mesa de apertura de la jornada.

La docente Arianna Fasanello, coordinadora de la UFAD destacó el encuentro como un punto de partida de un proceso de reflexión y trabajo colectivo en torno a la salud mental, y en ese sentido destacó la importancia de la palabra de cada una de las personas asistentes al encuentro, tanto estudiantes, docentes, egresadas/os y funcionarias/as.

De la mesa de apertura participaron el rector de la Udelar Prof. Rodrigo Arim, el decano de la Facultad de Psicología, Prof. Enrico Irrazábal y el decano de la Facultad de Artes, Prof. Fernando Miranda. También estuvo presente la diputada Cristina Lustemberg quien celebró la iniciativa de la jornada y consideró que la temática es uno de los temas más importantes a trabajar, y que está atravesado por una concepción de derechos humanos y por las determinantes sociales.

El rector Arim celebró el encuentro para poder pensar en clave institucional la temática, dijo que esta propuesta trasciende a la facultad y se ubica en el plano de lo que debemos hacer como universidad en el diseño de las políticas y enfoques en un área tan importante como es la salud mental.

Arim señaló que en general dentro de la Udelar se prioriza la discusión acerca de los diseños de políticas que hacen a las funciones universitarias básicas; pero se posterga y dificultan los espacios para reflexionar, diseñar y evaluar otras dimensiones de la vida universitaria que requieren una respuesta de la política para la prevención, la promoción y el cuidado de la salud mental. “Qué debemos hacer, cómo debemos enfocar estos temas, cuáles son los instrumentos y cómo se adaptan en los diversos contextos de la Udelar” son los principales desafíos, dijo Arim.

En la misma línea, el decano de Facultad de Artes sostuvo que este tipo de jornadas se inscriben en el 175 aniversario de la Udelar y en la posibilidad de debatir diversos temas. Esta actividad hace honor a la tradición que tenemos como institución, buscando estimular las discusiones universitarias de manera propositiva e incorporando distintas miradas. Asimismo, “la universidad aprobó un programa de salud mental que no es del área de salud y eso es un valor porque implica abordar el tema desde distintas perspectivas y orígenes disciplinarios que a veces nos falta o es un debe (…) de esto se trata también este tipo de actividades, permitirnos comprendernos de otra manera y mejor” señaló.

Por su parte, el decano de Facultad de Psicología se refirió al concepto de la salud mental, que exige ser “desarmado”. La necesidad del diálogo, de los espacios de encuentro para pensar este concepto es una de las estrategias cotidianas fundamentales para vivir. Esto significa deconstruir por un lado el término salud y por otro el concepto mental, para entender “qué hacemos con nosotros y entre nosotros, ya que el gran acontecimiento de la salud mental está en la vida cotidiana”, afirmó Irrazábal. Por ello, es clave el mejorar las condiciones de estudio y trabajo en la Udelar.

El decano de Psicología también se refirió a la Ley de Salud Mental y su falta de presupuesto; las miradas hegemónicas, las dificultades y carencias para trabajar sobre este tema tan complejo y sensible. También señaló los esfuerzos y espacios que sostienen el cuidado: prácticas creativas, efectivas y necesarias como las que se producen en el Hospital Maciel, las experiencias comunitarias universitarias como radio Vilardevoz, el trabajo de las organizaciones de familiares y de usuarios, de los sindicatos, el programa residencias en convenio con ASSE, con el Hospital de Clínicas, con Facultad de Medicina, entre otros. No obstante, consideró que ninguno de los esfuerzos puede ser efectivo si no se considera y se trabaja en conjunto con la red de familias y usuarios.

Desde la perspectiva de Derechos
El primer panel de la mañana contó con la participación de los docentes Ana Luz Protesoni y Fernando Texeira, coordinadores del Programa Interdisciplinario de Salud Mental, creado en sintonía con el Programa Nacional – Ley de Salud Mental. Ambos se plantearon el desafío de derribar dicotomías como la de “salud – enfermedad”; y la de “mente – cuerpo”.

En consonancia con la apertura de la jornada, Texeira comentó que el mayor grado de salud de una institución es la posibilidad de encontrarse con los problemas y movilizar sus distintos actores para buscar estrategias colectivas que permitan transformar esas problemáticas o situaciones dolorosas. “Pensar estos procesos no solo es pensar en el abordaje asistencial sino que tiene que ver con pensar la salud / enfermedad en el eje de los cuidados para ubicarlos también en las prácticas sociales que todas las personas podemos desarrollar (…) que no quita la necesidad de algunos abordajes especializados”, explicó el docente.

Ana Luz Protesoni habilitó el intercambio para desarmar el concepto de salud, donde fueron surgiendo las concepciones históricas y culturales en torno a esta noción. Protesoni retomó algunas de las definiciones surgidas y las relacionó con algunos hitos que son clave para entender la salud. Una de ellas es la propuesta por la Organización Mundial de la Salud (1946) que la define como un estado completo de bienestar que incluye lo físico, lo mental y lo social, no tratándose únicamente de la ausencia de enfermedad. Esta definición dio pie para que los Estados se comprometan en la mejora de las condiciones de vida de sus ciudadanos. En 1978 se definen los valores rectores para abordar las necesidades prioritarias y en 2018 se vuelve a reafirmar la concepción de la salud como un derecho humano fundamental. “Para que una atención primaria en salud sea de calidad, eficiente, equitativa es necesario empoderar a las personas y a las comunidades para que se sientan dueñas de su salud” dijo la docente y planteó que tenemos que trabajar la salud desde una perspectiva de derechos, social y comunitaria. Este desafío requiere que intervengan muchos actores, sociales, políticos y económicos además de los de la salud. Sin embargo, las políticas públicas en materia de salud aún no logran la participación social y la interseccionalidad.

Magalí Pastorino, Ana Luz Protesoni y Fernando Texeira.


Salud, enfermedad, cuidado, en la trama de la vida cotidiana
La docente del Programa Interdisciplinario de Salud Mental volvió a tomar algunas de las nociones compartidas sobre salud para precisar que la salud más que un estado es un proceso, “porque el proceso es lo que nos permite considerar las fluctuaciones, los vaivenes, el dinamismo, la salud no es un estado quieto”. Explicó que este proceso involucra las condiciones de vida material y simbólica y solamente pueden ser pensados en la trama de la vida cotidiana. Por este motivo, este proceso está permanentemente en equilibrio y desequilibrio y se recurre a estrategias de readaptación de manera constante.

Por otro lado, Protesoni se refirió al término “mental” y explicó que si bien marca una especificidad en la salud, trae el riesgo de considerar que hay una salud que corresponde a lo físico y otra a lo mental de manera separada. Para sortear estas dicotomías Protesoni propuso pensar en los cuidados, ya que puede resultar más útil a la hora de abordar la salud mental. Para ella, el cuidado tiene una connotación mucho más amplia e integral a diferencia del de atención, ubicándonos en relaciones mucho más horizontales e incluyendo el componente social y comunitario.

La docente coincidió con las anteriores exposiciones al considerar que buena parte de las acciones de salud ocurren en la vida cotidiana y en las prácticas, hábitos de todos los días y abrió nuevamente la participación para intercambiar acerca de las acciones que desarrollamos en los lugares de estudio, de trabajo, en la familia para producir y reproducir salud.

La docente finalizó citando la obra “Las tecnologías del yo. Y otros textos afines” de Michel Foucault para compartir algunas prácticas de cuidado de sí que vienen desde la Grecia clásica: “el retiro y la auto reflexión, el escribir, el saber escuchar y estar en silencio. Contemplar, la meditación, el diálogo franco y confesional consigo mismo y con los demás, la gimnasia”. Estas prácticas cotidianas además de considerarlas en sí mismas importantes, tienen una concepción sobre el mundo y sobre las otras personas, un modo de ser y estar.

La segunda parte de la jornada contó con la participación por un lado de Ana García y Jimena Boffa de Facultad de Medicina y de Araceli Otárola, Fabricio Martinez y Gabriela Dotti de la Unidad Académica Enfermería en Salud Mental (Ensame) quienes abordaron herramientas para el autocuidado y la buena convivencia en el ámbito universitario.

Por otro lado, participaron la presidenta del Servicio Central de Inclusión y Bienestar Universitario Mercedes Pérez; Yohanna Cabrera y Pilar Cristaldo, del Programa Unisa: Cuidados de la salud integral en la comunidad Universitaria; y Lilián González y Elina Zurdo del Núcleo Interdisciplinario Comunicación y Accesibilidad; quienes presentaron distintos abordajes de la salud mental desde diferentes equipos universitarios.

Conocer más:

  • Programa de inclusión y fortalecimiento del bienestar: clic aquí
  • Programa Unisa, hacia una universidad saludable: clic aquí.
  • Núcleo Interdisciplinario Comunicación y Accesibilidad: clic aquí.
  • Unidad Académica Enfermería en Salud Mental: clic aquí.
  • Unidad Académica de Psicología Médica: clic aquí.

Registro fotográfico: Área Foto, Cine y Video de Facultad Artes.

Ir al contenido